google.com, pub-6702223027763344, DIRECT, f08c47fec0942fa0 EJECUTIVOS & PROFESIONALES: mayo 2018

domingo, 27 de mayo de 2018

DIEZ ERRORES EN LAS COMPRAS DE NEGOCIOS

Los diez principales errores en compras de negocios

Lo que deben hacer los directivos para no equivocarse al invertir en nuevos equipos, servicios y programas para sus compañías


Un directivo de una compañía siempre está pensando en cómo mejorarla, hacerla más competitiva y mantenerla a la par o por delante de la competencia. Pero para eso se necesita invertir tiempo, dinero y esfuerzo, por lo que cada compra de equipos, servicios y programas debe analizarse con cuidado y teniendo la información suficiente, de manera que realmente sea una acción efectiva y eficaz. Merrin Muxlow, escritora de negocios de Resource Nation, hace una lista de los diez principales errores que cometen los directivos al comprar para sus organizaciones y da algunos consejos sobre cómo evitar estas equivocaciones para invertir mejor el dinero de la empresa. Por Catalina Franco R.



Un directivo puede tener muchas razones para adquirir nuevos equipos, servicios y programas para su empresa: quiere hacerla crecer, quiere ofrecer más productos y servicios, quiere ganarle a la competencia o simplemente desea deshacerse de todo lo viejo que lo rodea y que lo hace sentir que no se están obteniendo los mejores resultados posibles.

Y realmente comprar para mejorar una compañía puede ser una gran opción, siempre y cuando se cuente con la información necesaria para analizar y tomar decisiones adecuadas que garanticen que no se están perdiendo ni el tiempo ni el dinero ni el esfuerzo invertidos en la nueva adquisición.

Merrin Muxlow, escritora de negocios de Resource Nation, hace una lista de los diez principales errores que cometen los directivos al comprar para sus organizaciones, ya que muchas veces se dejan llevar por impulsos y por “gangas” de las que no quieren perderse, y da algunos consejos sobre cómo evitar estas equivocaciones para invertir mejor el dinero de la empresa.

¡A comprar lo necesario!

Los siguientes son los errores que menciona Muxlow:

1. Comprar demasiado pronto. Ella explica que los nuevos negocios generalmente pueden funcionar con lo mínimo e irse actualizando a medida que crecen. La regla general que recomienda es solo comprar lo que se puede usar mañana mismo ya que si no, es posible que no se llegue a usar nunca.

2. “Gangas” que no lo son. Comprar programas especializados con grandes descuentos en remates o liquidaciones puede ser una gran equivocación porque es posible que ni siquiera sean compatibles con los equipos que posee la empresa.

3. Compras por impulso. No dejarse convencer por vendedores hábiles ni ir de compras por la frustración de tener los mismos vejestorios de siempre. Muxlow dice “Los dueños de negocios realmente inteligentes solo hacen compras estratégicas”.

4. No negociar. En casi cualquier servicio o producto se pueden obtener buenos acuerdos, sobre todo con muchos vendedores que pueden ofrecer extras cuando se compra a fin de mes, de trimestre o de año, ya que esto puede hacer una diferencia en sus ventas.

5. No pedir referencias. Siempre pedir referencias cuando se trata de compras significativas, sobre todo si es para adquirir servicios continuos. Tratar de obtener recomendaciones y referencias locales.

6. Escatimar en investigación. Se deben tener claros algunos aspectos antes de empezar a comprar: el presupuesto, los requerimientos básicos, la duración del proceso de compra, entre otros, además de claves como que si se es una empresa pequeña no se debe perder tiempo contactando vendedores que solo tratan con gigantes.

7. Ser un sabelotodo. Aunque se sepa lo que se quiere, se debe estar abierto a nuevas opciones y no cerrarse en torno a un determinado producto, servicio o a una tecnología específica, ya que en el camino se pueden encontrar alternativas más apropiadas para el negocio.

8. Comprar basándose solo en el precio. Muxlow afirma: “El producto o servicio más barato no siempre es el mejor –y ni siquiera el más barato”. Ella explica que deben tenerse en cuenta costos adicionales que puedan existir a más largo plazo con lo que se adquiere.

9. No considerar costos de largo plazo. Muchas de las necesidades de los negocios pueden arrendarse y ahorrar un dinero en el primer momento, pero a la vez pueden salir mucho más caras en el largo plazo.

10. Sobre extenderse. Aunque un negocio tenga una necesidad fundamental, es posible que esta esté por fuera del presupuesto real de la compañía, por lo que se puede pensar en comprar algo más barato que después pueda actualizarse o en otras opciones que puedan darse a medida que se crece.

Seguridad en las decisiones

Es fundamental hacer todo lo posible por mejorar las condiciones actuales de un negocio, pero también se tiene que ser realista y precavido y pensar racionalmente en todas las alternativas que se tienen para tomar buenas decisiones y no arrepentirse después.

Como lo explica Muxlow, “Los más exitosos dueños de negocios saben que el buen juicio y el sentido común pueden llegar muy lejos. Compre solo lo que necesita, haga su tarea y no gaste hasta sus límites. Recuerde, un ‘buen trato’ es una compra con la que usted queda satisfecho, sin importar cuál haya sido el costo”.

GESTION DE OPERACIONES OPTIMAS

Guía práctica para optimizar las operaciones de su empresa 

Imprimir Compartir
 
En un contexto en el que la globalización y las nuevas tecnologías abren la puerta a innovadoras formas de trabajar, la excelencia e innovación en operaciones ha sido el fundamento de muchos de los grandes éxitos que el mundo empresarial ha escrito, como Zara, Ikea o Amazon

El libro Gestión de operaciones para directivos, de los profesores del IESE Philip Moscoso y Alejandro Lago --con la colaboración de Marc SachonNatalia YankovicJaume Ribera y Carlos Rodríguez-Lluesma--, revisa lo que un directivo debe saber sobre operaciones y propone esquemas prácticos para ayudar al directivo a rediseñar e innovar los procesos de la empresa y así aprovechar las operaciones como fuente de ventaja competitiva

Gestionar operaciones es utilizar recursos para "hacer cosas" de la manera más adecuada. Y con "hacer cosas" los autores no se refieren solo a la fabricación, sino también al I+D, el servicio al cliente, la gestión de proveedores o incluso la gestión de los procesos de venta

El objetivo primordial es cumplir la promesa al cliente de forma eficiente (a corto plazo) y sostenible (a largo plazo), posibilitando que se puedan hacer cosas diferentes que la competencia, explican los autores.

Philip Moscoso y Alejandro Lago explican la gestión de operaciones desde una perspectiva de dirección general. El resultado es una guía práctica enfocada a explicar los conceptos y metodologías con claridad; analizar el impacto de las operaciones en todos los ámbitos de la empresa (comercial, finanzas, estrategia, etc.), y revelar claves útiles para ayudar al directivo a desarrollar el pleno potencial de su empresa. 



El libro cubre las áreas tradicionales de la dirección de operaciones, como son el diseño de procesos; el análisis de capacidades; la gestión de stocks y colas, y la gestión de la calidad
Asimismo, la obra incluye temas más avanzados, como el lean management, la gestión de las compras y la cadena de suministro, y se han introducido temas que otros libros cubren en menor medida, como los aspectos humanos y organizativos de las operaciones, la innovación o la gestión de proyectos. Además, lejos de limitar su visión a entornos industriales, el libro aporta conocimientos relevantes sobre operaciones en entornos de servicios. 

Los autores plantean un enfoque incremental que parte de entender y asegurar primero la gestión del día a día, para luego enfocarse en eldiseño de un sistema de operaciones adecuado a la estrategia de la empresa y, finalmente, plantear los mecanismos de mejora e innovación.

Entendiendo las operaciones en el día a día
A la hora de analizar la gestión de operaciones, Philip Moscoso Alejandro Lago destacan la importancia de entender adecuadamente el comportamiento de cuatro variables fundamentales del sistema:
  • Procesos. La secuencia de actividades a lo largo de las cuales tienen lugar las transformaciones de los inputs en outputs.
  • Capacidades. La configuración de tipos y cantidades de recursos disponibles para asegurar que el sistema puede procesar el volumen de ítems (productos, clientes, etc.) por unidad de tiempo deseado.
  • Flujos. La manera en que fluyen los productos o clientes en el tiempo, cuánto tardan y dónde se acumulan o esperan, así como los sistemas de dirección disponibles para la planificación y el control de dichos flujos.
  • Personas y organización. Cómo aprovechar a las personas que intervienen en el sistema a través de un plan de dirección adecuado. El capital humano y la estructura acaban definiendo al sistema tanto a corto como a largo plazo.
Al tratarse de una cadena de valor en su conjunto, la gestión de cada parte afecta al rendimiento del conjunto y los autores hacen énfasis en las diferentes palancas que permiten equilibrar coste, flexibilidad y rapidez en el cumplimiento de la promesa al cliente.

El diseño de la estrategia operativa
En el segundo bloque del libro, Moscoso y Lago abordan el diseño de las operaciones para asegurar su coherencia con la estrategia competitiva que busca la empresa. 

Para ello, proponen partir del análisis de la cadena de valor necesaria para producir un producto o servicio y analizar el diseño de diferentes variables: la estructura y tipologías de procesos, los tipos y ubicación de las capacidades productivas, la gestión de los flujos dentro de la cadena de suministro (incluidas las compras y la relación con los proveedores) y la gestión del servicio al cliente final.

Los autores enfatizan la necesidad de buscar diseños que primen la flexibilidad y la capacidad de respuesta, más allá de la eficiencia. En particular, recomiendan: 
  • Segmentar adecuadamente los procesos y buscar tipologías diferentes según se busque mayor o menor especialización en la oferta de servicio.
  • Dimensionar la capacidad con esquemas que combinen una capacidad fija y más barata con otra más flexible, y que consideren la localización de los centros productivos teniendo en cuenta el coste, la capacidad de respuesta y el know-how.
  • Planificar los cuatro ciclos principales de la cadena de suministro (aprovisionamiento, producción, distribución y entrega final), fomentando la coordinación y colaboración entre los integrantes de la cadena.
  • Evaluar la conveniencia de externalizar a terceros ciertas actividades, considerando tanto el impacto económico como de los riesgos operativos (ligados a los suministros) y los riesgos estratégicos (ligados al impacto en el cliente y en el ritmo de innovación).
  • Desarrollar la interfaz de servicio al cliente final teniendo en cuenta la consistencia del servicio, la capacidad de respuesta y el valor emocional de la interacción, para lo cual es necesario diseñar los mecanismos adecuados de medición y seguimiento del servicio prestado.
La mejora y la innovación
Finalmente, los autores reconocen que incluso los modelos de más éxito pueden quedar obsoletos con el paso del tiempo, motivo por el que insisten en la constante evaluación e innovación de las operaciones.

En este sentido, Moscoso y Lago consideran que la competitividad a largo plazo requiere un sistema de gestión de la calidad y mejora continua de los sistemas de operaciones y, en paralelo, la innovación y testeo de maneras completamente distintas de operar en la empresa (nuevas formas de gestionar pedidos, fabricar productos o prestar el servicio al cliente). 

Para esto último, no solo hay que replantearse el cómo se hacen las cosas, sino también qué se quiere hacer y para quién. Algunas de las posibles acciones que proponen son:
  • Desarrollar propuestas enfocadas a nichos de clientes insatisfechos o no servidos.
  • Incorporar servicios de más valor añadido o personalizarlos.
  • Reconfigurar la cadena de valor cambiando los roles de los integrantes.
  • Apostar por la colaboración del cliente en la creación de valor.
  • Aprovechar las oportunidades que brindan las nuevas tecnologíaspara la innovación de las operaciones.

DIAGNOSTICO DE OPERACIONES

Diagnóstico de operaciones (análisis 'día bueno, día malo')

AUTOR(A): Venezuela CompetitivaTEMA: Operaciones y LogísticaPUBLICADO: 18/03/2004
 
 0 7 0 1 0Evernote0
OPCIONES
 Comentar artículo
 Leer comentarios
 Contactar a Venezuela Competitiva>
MAS INFORMACION
 Artículos relacionados
 Más sobre: Operaciones y Logística
 Perfil de: Venezuela Competitiva
 Otros artículos del autor
Recomendación

Analice la producción de su planta, determine cuánto se produce en un día promedio, en un día malo y en un día bueno. Determine las causas de cada tipo de día. Implemente acciones correctivas

Herramienta

La mayoría de los procesos productivos (particularmente en manufactura) presentan una gran variabilidad: la diferencia entre lo que se produce en un día bueno y en un día malo suele ser muy grande. Al analizar estos días buenos y días malos en detalle se obtienen las causas más comunes para solucionarlas (las de los malos) o para replicarlas (las de los buenos). La reducción de variabilidad en la producción genera aumentos en productividad, con las consiguientes reducciones de costos (reducción de inventarios, materia prima, desperdicios, etc.) o aumentos de la venta (en los casos en que la producción sea una limitación para la venta).

Aplicación


  • Si no posee un registro de producción diaria (o por turno), comience a llevarlo. Simplemente Introduzca en una hoja de cálculo la fecha (el turno si aplica) y el nivel de producción de cada día. Al hacerlo por unos 30 días ya se comienza a tener información valiosa. Si ya posee un registro, asegúrese de que ha sido introducido en una hoja de cálculo.
  • Determine el promedio de producción, el percentil 80 (es decir, el mejor 20% de los días) y el percentil 20 (es decir, el peor 20% de los días). Cualquier programa de hoja de cálculo permite realizar estos cálculos con gran facilidad. Identifique las fechas de los días que caen en cada categoría (los “días buenos” y los “días malos”).
  • Determine con el personal de producción las causas que llevaron a estos días buenos y días malos. Para este fin, es muy útil contar con un registro de eventos, que puede ser tan simple como un cuaderno en el que el jefe de turno (o cualquier empleado de la operación) escriba al final del día cualquier evento relevante ocurrido (número de paradas no programadas, etc)
  • Normalmente la causa de los días malos se encuentra en el número de interrupciones a la producción, las cuales pueden tener su origen, entre otras cosas, en el mantenimiento de los equipo o en el área de planificación. En el caso de mantenimiento, la intervención de la alta gerencia, la disponibilidad de repuestos (producto de las mejoras en procura y manejo de inventarios), la claridad de metas y objetivos, el análisis de las paradas por frecuencia y duración, y una mejor coordinación, pueden contribuir significativamente a disminuir las interrupciones. En estos casos es útil crear un registro de paradas, en el que para cada parada no programada de la planta se registra el tiempo total de parada, la causa de la misma, y la solución que se aplico para reanudar la producción.
  • Cuando las interrupciones tienen su origen en la planificación de la producción, bien sea por cambios de producto, falta de materias primas o por necesidades de entregas no programadas, una mejor comunicación entre el área comercial y de manufactura puede ayudar a mejorar los resultados (ver Herramienta Planificación de producción).
  • Para los “días buenos” también es importante tratar de determinar patrones de razones que logren explicarlos, y de esta manera tratar de replicar estas prácticas todos los días.
  • En términos generales, el simple hecho de establecer los diferentes registros (producción, eventos, paradas) y criterios para diferenciar un día bueno de uno malo, y el conversar con los empleados acerca de las causas, permite a los operadores darse cuenta de oportunidades de mejora “obvias” para el proceso.


Esta recomendación forma parte del manual "Auxilios Financieros" producido por Venezuela Competitiva, que pone al alcance de los empresarios y gerentes de pequeñas y medianas empresas un conjunto de recomendaciones para hacer frente inmediato a los problemas de sus empresas, para tratar de impedir que se agraven, mientras se logra darles una atención adecuada y profesional para hacer frente inmediato a los problemas de sus empresas, para tratar de impedir que se agraven, mientras se logra darles una atención adecuada y profesional.

ROL DEL GERENTE DE ABASTECIMIENTOS

¿Cuál es el rol del gerente de abastecimiento?

AUTOR(A): Diego FerreroTEMA: Gestión de comprasPUBLICADO: 15/12/2005
 
 1 79 12 1 12Evernote1
OPCIONES
 Comentar artículo
 Leer comentarios
 Contactar a Diego Ferrero>
MAS INFORMACION
 Artículos relacionados
 Más sobre: Gestión de compras
 Perfil de: Diego Ferrero
 Otros artículos del autor
El área de compras es quizás, uno de los sectores más expuestos de la empresa, ya que concentra las presiones de la alta dirección en lo que a precios de insumos y servicios se refiere, concentra además, las expectativas de los usuarios para que sean satisfechas sus necesidades.

La función de compras es ejercida - dependiendo el tamaño de la empresa - por diferentes individuos. Por lo general en las pequeñas y medianas empresas (PYMES) esta función puede desglosarse en compras menores, llevadas a cabo por un empleado de la compañía y compras de vital importancia, que en algunos casos son efectuadas por el mismo titular de la firma. Por otra parte, en grandes compañías esta función está muy bien delimitada y comprende una serie de actividades que no solo están asociadas con la adquisición de materiales y servicios, sino también con el diseño y el uso de KPI necesarios para el correcto ejercicio de la actividad de compra. En éstas grandes compañías, es posible encontrar también, una serie de disposiciones bajo la forma de políticas y procedimientos, que por lo general conforman lo que se suele conocer como Manual de Abastecimiento o Manual de Compras.

Si hacemos un poco de historia, observaremos que la función de compras ha ido evolucionando lentamente. Al principio la actividad de comprar carecía de profesionalismo, esto último entendido como una escasez de profesionales en el área, especialmente capacitados para ejercer ese tipo de función. Tradicionalmente el comprador era aquel empleado que conocía muy bien los materiales que se utilizaban en la planta, y los proveedores que eran capaces de suministrarlos. Era habitual que tuvieran una capacitación técnica, y adicionalmente algún conocimiento muy vago de estrategias de negociación. En éste sentido, era muy usual utilizar como estrategia el “regateo”, que consiste, básicamente en asumir por parte del comprador una posición defensiva y pensar solo en ganar la contienda, más que en buscar un acuerdo positivo para ambas partes.

En los últimos años podríamos decir que hubo un “profesionalismo” a medias de éstas áreas de compras, ya que comenzaron a interesarse en estas posiciones profesionales de diferentes disciplinas; así hicieron su aparición ingenieros industriales y mecánicos, licenciados en administración, en tecnología de los alimentos, químicos, etc.

Todos tuvieron la virtud de aportar los conocimientos de cada rama de la ciencia a la actividad de comprar. Sin embargo había una característica común a todos ellos: ninguno era un profesional de compras. Realmente la actividad de comprar se ha transformado en una profesión con peso propio que engloba a una serie de ciencias que van desde las matemáticas, la sociología, la psicología, la tecnología de los alimentos y la química para mencionar solo a algunas.

En este sentido es interesante mencionar los diferentes estados de evolución del área de compras de acuerdo a las observaciones realizadas por Donald W. Dobler y David N. Burt en su libro “Purchasing and Supply Management” .

Ellos mencionan cuatro estados de evolución del área: Re-activo, Mecánico, Pro-activo y Administración Estratégica del Abastecimiento. Las características de cada uno de estos estados las encontramos en la siguiente figura.

cuatro estados de evolución del área de compras

Podríamos decir también que como consecuencia de ésta evolución, se produjeron dos cambios notorios en la manera de pensar de los gerentes de compras, que hacen indefectiblemente a la estrategia.

  1. Valor Agregado: El área de compras participaría en aquellas adquisiciones o actividades que impliquen un agregado de valor para la tarea a ejercer. Dicho de otra manera se comenzó a mirar hacia los procesos internos de las compañías para encontrar dónde el departamento de compras podría generar un ahorro. El Valor Agregado que podría generarse a partir de la participación de compras se lo encontraría entonces en: la calidad de los insumos, los costos, el tiempo de entrega, la tecnología, y en el manejo correcto del flujo de los materiales.
  2. Foco Estratégico: En éste sentido, se ha pasado de hacer foco en lo táctico, para concentrarse en lo estratégico. La definición del foco estratégico podemos hacerla girar en torno de tres puntos :

    • El área de compras sólo participaría en aquellas actividades que aporten un valor agregado para la compañía. El resto de las actividades, que no aporten ningún valor para la compañía o que no logren ser percibidas cómo un verdadero Valor Agregado por el consumidor, deberán indefectiblemente ser descentralizadas.
    • Profesionalizar el área de compras, a partir de la búsqueda de individuos con el conocimiento requerido para la nueva Visión del área de abastecimiento.
    • Identificar y definir un modelo estratégico de abastecimiento, que permita tanto el crecimiento de la Empresa como de su gente.

Gracias a éste aggiornamiento que ha sufrido el área de compras, los nombres de las posiciones, también han sufrido cambios. Así, al responsable del área de compras se lo suele llamar: gerente de compras, de abastecimiento, de materiales y de adquisiciones, por solo nombrar los más comunes. Todos ellos parecen cumplir con las mismas funciones.

Los anglosajones, muy por el contrario, han sido bastante más metódicos y más claros en ése sentido. Ellos han identificado, cómo es la cadena de abastecimiento y han definido cuál es la función requerida para cada una de ellas. Por ejemplo, en la bibliografía anglosajona es posible encontrar las siguientes posiciones: purchasing manager, procurement manager, material manager o supply chain manager. Las diferencias entre estas palabras inglesas y las españolas, radica en que las primeras tienen funciones específicas y son evolutivas. Con esto último quiero decir que, purchasing evoluciona a procurement, éste a material management y éste a supply chain management.

purchasing evoluciona a procurement, éste a material management y éste a supply chain management

A partir de ésta visión del área que evoluciona hacia el concepto de supply chain o hacia la administración total de la cadena de abastecimiento, es muy claro que el rol ya deja de concentrarse en lo táctico para hacer foco en los aspectos estratégicos de la gestión. Y en éste sentido, soy de la idea que el aspecto estratégico más importante a tener en cuenta, es la identificación de las incertidumbres que se generan en toda la cadena de abastecimiento; de manera que el rol del gerente de abastecimiento reside en la administración de esas incertidumbres, mediante la identificación, definición, diseño e implementación de las mejores estrategias, para hacerles frente.

TIPS PARA NEGOCIOS ON LINE

Siete tips para aprovechar los negocios online

El aumento de casi un 42% respecto al 2011 en la adquisición de tecnologías también cambian la forma en que se hacen negocios y se trabaja en la actualidad de la mano con este tipo de tecnologías.
Si queremos evitar ir por el precipicio de la seguridad y realmente implementar un cambio significativo, tenemos que actuar con mayor colaboración y decisión que nunca.  Si queremos evitar ir por el precipicio de la seguridad y realmente implementar un cambio significativo, tenemos que actuar con mayor colaboración y decisión que nunca.
La venta récord de 671 millones de teléfonos inteligentes en el mundo durante el último año en definitiva marca un nuevo récord para los fabricantes de teléfonos móviles y un importante desafío para todas las organizaciones a nivel mundial. 

Sin lugar a dudas, el aumento de casi un 42% respecto al 2011 en la adquisición de tecnologías también cambian la forma en que se hacen negocios y se trabaja en la actualidad de la mano con este tipo de tecnologías.

Ante esta realidad los gerentes de TI de compañías, y los gerentes generales y directores en instituciones públicas, deben cambiar sus sistemas para que así éstos puedan soportar el acceso de un alto número de usuarios conectados desde múltiples dispositivos, mientras que cubren las necesidades de tráfico de datos requeridos, y garantizan la conexión estable a paquetes de datos y aplicaciones de negocios o personales.

Según un estudio de TrackVia , el 40% de los empleados de las grandes organizaciones en el mundo considera que la capacidad de usar dispositivos personales en el trabajo es muy importante, al mismo tiempo que 63% opina que los programas de Bring Your Own Device (BYOD), influyen de manera positiva en la opinión que tienen de la compañía.

Marcos Nehme, director técnico de América Latina y el Caribe de RSA, la división de seguridad de EMC, brinda una serie de consejos a las empresas que desean implementar una estrategia de BYOD, para la transformación del panorama de los negocios: 

1. Antes de determinar si una empresa está lista para la práctica de BYOD, se recomienda definir si realmente tiene la necesidad y obtendrá los beneficios de negocio. Las compañías que estén considerando utilizar esta estrategia deben analizar cuánto pueden ganar o perder con ella, además de poner en una balanza diversos aspectos de la empresa y medir el impacto competitivo frente a una firma que sí la está implementando.

2.
 Asimismo, es imperativo determinar los retos y riesgos que significa implementar una estrategia de BYOD dentro de la organización. Luego de que el personal corporativo comenzó a tener acceso a datos de las organizaciones desde sus dispositivos móviles, el riesgo de una posible pérdida de datos o información comenzó a preocupar a las cabezas de las grandes empresas, además de los encargados de los departamentos de TI. Es un hecho: BYOD no está libre de riesgos. El comportamiento o los malos hábitos de seguridad de cualquier empleado pueden salirse del control del departamento de TI, a medida que BYOD crezca en la red de la compañía. En este sentido, muchas empresas han adoptado este concepto sin pensar en las consecuencias de seguridad.

3. Por otra parte, las compañías que estén considerando utilizar esta estrategia de BYOD deben poner en una balanza el impacto competitivo que traerá dicha estrategia a la organización frente a una firma que sí la está implementando. Si la red corporativa no está lista para un crecimiento importante de dispositivos personales, es obvio que los usuarios la van a dejar de usar y eso puede ser un riesgo peor que no haberla implementado. Por ello se debe evaluar detenidamente la infraestructura de la empresa, sus mecanismos de seguridad y hasta las aplicaciones y contenidos que correrán en ella para prevenir futuras incidencias en seguridad.

5. Es necesario considerar que una parte importante del retorno de inversión del BYOD son aspectos intangibles, como la atracción de talento, la mejora de la productividad y el aumento en la competitividad; incluso puede representar una oportunidad para desarrollar novedosos esquemas de negocio más atractivos para clientes nuevos. El principal reto consiste en hacer un equilibrio entre permitir el uso de BYOD y el establecimiento de políticas de seguridad, acompañadas de capacitación para el personal corporativo.

6. En cualquier compañía que utilice BYOD es necesario asegurar la solidez de los sistemas desde dentro, logrando que el entorno esté altamente protegido, independientemente de dónde provenga la petición de acceso. Esta práctica debe venir acompañada de adiestramientos y educación al personal a quien se le autoriza el de su dispositivo personal. Por otra parte, el que los empleados utilicen sus propios dispositivos para el trabajo es algo que debe estar controlado. Esto lleva a recomendar que la implantación del BYOD no se deba dejar a la espontaneidad, sino que se debe planificar. El personal de TI debe conocer y entender las necesidades de los empleados, pero valorando la conveniencia de poner en marcha un plan de BYOD; entendiendo a la vez que es trabajo de todos evaluar las ventajas y calcular los costos de planificación y de protección de datos, a través de tecnologías de gerenciamiento de móviles y tecnologías que nos ayuden a evitar la fuga de la información confidencial.

7. Las organizaciones deben implementar tecnologías con la capacidad de monitorear comportamientos e identificar rápidamente patrones, antes considerados ocultos y asociados a fraudes, y correlacionarse con los nuevos procesos y políticas de seguridad. Solamente con esta estrategia aplicada a los nuevos esquemas innovadores de tecnología como nube, movilidad, etc, estaremos mitigando los riesgos de la desigualdad tecnológica.

En general, debemos cambiar el paradigma y pensar que en la época actual, donde las violaciones y ataques cibernéticos son probables y no inevitables, sólo un modelo basado en la inteligencia y orientado situacionalmente puede ser lo suficientemente resistente como para minimizar o eliminar los efectos de los ataques. 

En definitiva, la tendencia es hacia la movilidad, con lo cual es muy probable que la mayoría de las empresas, industrias y gobiernos migren hacia este modelo de seguridad basado en la inteligencia. Por esta razón, las organizaciones y sus trabajadores deben actuar con conciencia y responsabilidad para implementar niveles máximos de seguridad en sus plataformas, y así defenderse de manera profunda de un entorno de amenazas muy avanzado. Si queremos evitar ir por el precipicio de la seguridad y realmente implementar un cambio significativo, tenemos que actuar con mayor colaboración y decisión que nunca.